La primera parte el equipo ha estado muy bien. Dominio en el juego, tocando, interpretando muy bien el planteamiento, con mucho toque, con llegadas por banda y con opciones de gol. En defintiva, los mejores minutos de la temporada, a un nivel muy alto, ante uno de los conjuntos más fuertes de la categoría. Además, el equipo ha estado muy bien en defensa, impidiendo que el Burgos Promesas creara ocasiones de gol.
En una de ellas, Risu lanzó una falta que remató José para hacer el 1-0 y hacer justicia a los méritos de los dos equipos. Era el minuto 16 y tal como estaba el Santa Marta, podía haber conseguido algún tanto más. Joel dispuso de un buen lanzamiento de falta que sacó el porteró, que volvió a tener que estirarse tras un lanzamiento de esquina ensayado. Sin embargo, no llegaron más goles.
En la segunda mitad, el equipo entró muy frío al campo y el Burgos Promesas consiguió el empate a los pocos minutos de la reanudación. El Santa Marta continuaba con la presión y en otra acción a balón parado, tras un lanzamiento de esquina de Joel, Garci tocó y el balón acabó entrando.
Pero ahí el equipo se puso algo nervioso, acusó en exceso el juego físico del rival, que no fue cortado en ningún momento por el árbitro. En una acción aislada y muy dudosa, el colegidado pitó penalti en contra del Santa Marta, que se transformó en el empate a dos.
A pesar de ello, el Santa Marta volvió a tener ocasiones: una para Nieto y un remate de Garci en el tiempo añadido que sacó un defensa bajo palos con las manos, sin que el árbitro señalara penalti.
De esta forma, el Santa Marta se quedó sin un triunfo merecido, pagando en exceso su falta de gol, como le ha ocurrido en las últimas jornadas, aunque con la satisfacción de que el juego ha mejorado sensiblemente en las últimas jornadas.
