El importante duelo ante el Villaralbo acabó 1-1, reparto de puntos y la sensación en las filas locales de que dos puntos que merecieron no se quedaron en casa porque no lo permitieron y es que con el duelo empatado y a falta de cinco minutos se anuló un gol claramente legal. Un hecho que se sumó a una serie de acciones durante el duelo que siempre perjudicaron a los locales.
Se sabía que el partido ante el Villaralbo iba a ser muy disputado y complicado porque los dos equipos se jugaban mucho. Se contaba con la oposición que iba a poner sobre el terreno de juego el rival y se manejaban armas para contrarrestarlo pero hay cosas con las que no se cuenta y contra las que además no se puede luchar. No fue un buen día el que tuvo el colegiado en el Alfonso San Casto y eso perjudicó claramente a los locales.
Un equipo el de la UD Santa Marta que salió decidido desde el minuto uno a por el encuentro y en el que tras los diez primeros minutos de tanteo entre los dos equipos fue poco a poco haciéndose dueño y acercándose al área visitante con peligro. En una acción a balón parado Lerma fue el primero en rondar el marco del equipo zamorano y poco después Jorge tuvo oportunidad clarísima tras encontrarse cara a cara con el portero desde el punto de penalti. El guardameta se le echó encima y sacó el balón.
El dominio era constante y Ramajo también probó fortuna hasta que él mismo encontró el gol pasada la media hora de juego en un perfecto balón enviado al área desde donde no pedonó.
El equipo local tenía controlado el partido y también en la reanudación tuvo oportunidad de ampliar su cuenta pero Lerma no atinó en otro remate de cabeza. Tenía que estirarse algo el Villaralbo, que necesitaba ganar, y lo hizo de manera que el choque se convirtió en un duelo más abierto en el que se vislumbraba que cualquiera podía hacer el gol.
Llegó para los visitantes en casi el único desajuste defensivo del encuentro. En el mano a mano entre Chemi y Charly el delantero estuvo un pelín más rápido y golpeó para superar al guardameta local.
Tras el 1-1, la UDSM siguió buscando con paciencia la oportunidad para poder llevarse el duelo y perseveró hasta pasado el minuto 80. Entonces recuperó un balón en la zona de tres cuartos, Jorge progresó e ingresó en el área enviando un balón perfecto al otro palo para la llegada de Lerma que marcó. Era gol legal y entonces el linier, que durante todo el segundo tiempo había estado rigurosísimo en las señalizaciones del fuera de juego, volvió a levantar la banderola ante la incredulidad general.
El colegiado le hizo caso y anuló el tanto. De ahí hasta el final un despropósito que acabó con Jorge expulsado por decir "no lo ves" y con el cabreo generalizado de los locales que veían como les impedían llevarse tres puntos merecidos.