Un punto más después de igualar 0-0 ante el Rayo Majadahonda en un partido en el que sin duda el equipo de la UD Santa Marta mereció mucho más pero topó con la inspiración del portero visitante. También Álvaro tuvo su protagonismo pero en dos únicas ocasiones visitantes.
La Unión Deportiva Santa Marta salió al terreno de juego ante el Rayo Majadahonda con una máxima similar a la de cualquier otro partido, sobre todo en casa. Buen trato de balón y buscar el área contraria con paciencia e intensidad. De esa manera el equipo de Sergio Hernández rondaba el área del equipo madrileño con continuidad y solo faltaba poner a prueba al portero visitante.
El primero en intentar sorprender fue Mongil con un disparo que se fue alto, aunque mucha más clara fue una ocasión de Aaron que remató de cabeza un centro desde la banda. El balón cogió fuerza tras el bote y se marchó por encima de la portería.
Se llegó al descanso sin que se pudiera hablar de oportunidades mucho más claras pero ya en la segunda mitad sí que las hubo. Incluso el Rayo, que apenas había rondado la frontal de Álvaro en todo el primer tiempo, se estiró un poco y Borao fue el más peligroso con un disparo que se le fue cruzado tras una buena jugada personal.
Entre el minuto 65 y el 78 llegaron varias ocasiones, dos para los visitantes y hasta cinco clarísimas para la UD Santa Marta. Quesada, Aaron y Visus estuvieron cerca del tanto pero el portero Lombo se erigía en héroe de su equpo con varios paradones que evitaron que al marcador del Santa Marta subiera un tanto que mereció pero que se resistió hasta el mismísimo pitido final.