Victoria rotunda y que para evitar cualquier duda se construyó de principio a fin (4-0) frente a un Onzonilla superado por el fútbol y por las ganas que puso el equipo de Arturo. Protagonista Javi Borrego, en un partido especialmente emotivo para él.
Antes el pitido inicial minuto de silencio en memoria de la abuela del delantero de la UD Santa Marta que al poco de iniciarse el duelo ya reclamaba protagonismo. Se adelantó el equipo local a los tres minutos de juego sorprendiendo a su rival con su ambición. Lolo soltó un zapatazo que sorprendió al portero y a todos. El balón quedó muerto, daba la sensación de que podía haber entrado pero por si acaso Borrego remachó sobre la línea de gol. En el acta el colegiado finalmente le dio el tanto a Lolo pero lo importante es que el 1-0 era un hecho.
Y ese gol le dio seguridad al equipo y apocó a su rival que apenas se atrevía, o encontraba vías, para pasar del centro del campo. Como mucho alcanzaba la frontal del área del Santa Marta que recuperaba y salía con velocidad, como un tiro, hacia el marco contrario. En la medular todo lo rebañaban Asensio y Rubio y así el partido se volcaba por entero en el campo del Onzonilla que veía como las llegadas sobre su portería se sucedían.
El 2-0 era cuestión de tiempo y pasada la media hora Javi Borrego recibió un balón en profundidad y en velocidad ganó el área sin que nadie le pudiera alcanzar para evitar un disparo inapelable al fondo de la portería. Esta vez no había duda sobre de quién era el tanto.
Wiki, Asensio, Cascón... todos tuvieron oportunidad antes del descanso de seguir aumentando esa ventaja ya clara pero hubo que esperar a la reanudación para que, de nuevo Borrego, pusiera el 3-0.
Lo hizo tras una gran acción combinada de todo el equipo que finalizó con un gran pase de Manu que su compañero no desaprovechó en el área pequeña. El partido caminaba hacia un marcador abultado pero lógicamente el ritmo fue bajando con el paso de los minutos.
Eso sí, hubo tiempo para que llegara un cuarto tanto, obra de Cornejo al poco de entrar en el terreno de juego y tras un doble remate. Ahí ya sí el partido comenzó a morir. Intentó estirarse el Onzonilla pero ni Manu ni Jorge tuvieron que intervenir para evitar una ocasión clara en todo el encuentro que fue del Santa Marta de principio a fin. Puso el fútbol y puso el alma en ello.
