El triunfo de una piña, un equipo con mayúsculas que creyó en él hasta el último suspiro y cierra así la primera vuelta con tres puntos más en su casillero. No lo puso fácil el Béjar, que incluso se adelantó en el marcador, pero el resultado hizo justicia a la cantidad de ocasiones de las que gozó el equipo. Tres acabaron en gol, las tres transformadas por Manu para el 3-2 definitivo.
Importante victoria para cerrar la primera vuelta de la Liga en un derbi siempre complicado y ante un Béjar que está haciendo una gran temporada. Que no fue sencillo está claro porque el duelo se tuvo que resolver en el tiempo de descuento, en buena medida porque el Santa Marta no pudo o no supo aprovechar las numerosas oportunidades de las que dispuso a lo largo de los 90 minutos mientras que su rival tuvo una gran efectividad en el área.
De hecho se adelantó el Béjar cuando apenas habían transcurrido tres minutos de juego en una bonita acción en la que Samu le puso un pase interior a Rodri que le dejó cara a cara con Manu para no desaprovecharlo. Un jarro de agua fría del que se repuso bien el equipo de Arturo, buscando la portería contraria rápidamente para buscar el empate. Lo rondó con varias ocasiones claras, en particular una de Martiña, y creando mucho peligro desde la banda derecha con los centros de Silleros.
Precisamente así llegó el tanto tras un saque de banda del lateral, combinación con Ramajo, centro hacia el área pequeña donde apareció Manu para no perdonar.
Con el 1-1 siguió el Santa Marta buscando el gol que le permitiera situarse por delante, sin dejar al Béjar salir casi de su campo aunque aguantó bien hasta el descanso.
Siguió la misma tónica tras la reanudación y ahí sí encontró la recompensa el Santa Marta. Lo hizo tras un balón despejado desde su propio campo que llegó a la inmediaciones de Manu. Evitó el fuera de juego ganando la espalda a los centrales y se quedó sólo en el área donde no es de los que perdonan. Tras el 2-1 aun tuvieron Martiña y Borrego dos ocasiones clarísimas para haber dejado el duelo resuelto pero perdonaron y eso no lo desaprovechó el Béjar.
El conjunto de Israel se estiró aprovechando que los locales se replegaron buscando alguna contra y Elices le puso un balón en el área a Rodri que, sin dejarlo bajar, sorprendió con un disparo cruzado para el 2-2.
Restaban 20 minutos para el final y lo intentaba con más empuje que ideas claras el Santa Marta que no se rendía pese a que no le salían las cosas. Y fruto de esa insistencia, ya en el tiempo de descuento, de nuevo apareció Manu que aprovechó un balón peinado por Martiña para plantarse de nuevo en solitario en el área y situar el definitivo y celebrado 3-2. Un broche de oro para una primera vuelta que permite seguir luchando por el objetivo marcado.
